Tips para mejorar tu presupuesto

Amortiguar la pérdida de poder adquisitivo es esencial en Argentina. Tanto para los trabajadores asalariados como los informales. Ambos hace años en argentina tienen una actualización de lo que sobran por debajo de la inflación.

Veamos entonces cómo mejorar la administración, mientras esperamos que las paritarias sean mejores, claro!

La clave está en ajustar los gastos e identificar cómo generar ingresos adicionales. Acá algunos consejos prácticos para que armar un presupuesto se convierta en una herramienta útil y efectiva en tu día a día.

El primer paso es evaluar de dónde se pueden hacer ajustes en los gastos. A menudo, es posible encontrar áreas en las que se puede reducir el gasto sin afectar demasiado la calidad de vida. Es fundamental hacer un análisis honesto de las prioridades y recortar lo que realmente no es necesario. Esto no solo te permite estirar más tus ingresos, sino también identificar posibles fuentes de ingresos extras para complementar tu presupuesto.

Una trampa común es pagar las cuentas, como la luz, el gas, o el teléfono, antes de su vencimiento. Aunque parece conveniente, esa misma cantidad de dinero podría estar trabajando para vos en un fondo de Money Market, generando rendimientos. Al invertir esos fondos, podés reducir la cuenta que tenés que pagar al final del mes, lo que se traduce en un uso más eficiente de tu dinero.

Es crucial no dejar el dinero “durmiendo” en la cuenta bancaria. Si sabés que necesitarás cierta cantidad para gastos inmediatos, considerá trasladar el resto a un fondo común de inversión (FCI) Money Market con liquidez inmediata. Estos fondos suelen ofrecer una tasa efectiva mensual atractiva. Usando un ejemplo, si tenés $30.000 en la cuenta y sabés que gastarás $15.000, se podría invertir el resto para ganar un poco adicional.

Es esencial tener claridad sobre los gastos fijos mensuales, que incluyen luz, alquiler, y servicios. Una buena práctica es sumar todos estos gastos y dividir la diferencia entre lo que ganas. Esto te dará un panorama diario de tu presupuesto y te ayudará a determinar si es sostenible. Si el promedio diario de gastos supera tu capacidad, es un claro indicador de que necesitas aumentar tus ingresos o reducir tus gastos.

Con la inflación en torno al 4% mensual, otra estrategia efectiva es adelantar consumos. Esto significa que, al recibir tu salario, separás dinero para gastos fijos y un fondo de emergencia, y con el resto podés ir al supermercado mayorista. Este tipo de compras puede permitirte ahorrar asegurando que tu dinero rinda más a lo largo del mes.

Si utilizás tarjeta de crédito, hacelo estratégicamente. Comprar justo después de la fecha de cierre te otorga un mes de tiempo antes del pago, lo cual es útil en un contexto inflacionario. Sin embargo, es fundamental analizar si el uso de la tarjeta ofrece un descuento o si, en realidad, el precio es más alto. Si el recargo representa un aumento superior a la inflación, sería mejor optar por efectivo.

Llevar un control de las fechas de vencimiento de las cuentas es crucial para evitar sorpresas. Sabé exactamente cuánto dinero necesitás tener disponible en cada fecha y poné el resto en un FCI Money Market, donde podrás acceder a esos fondos de manera inmediata. Así, reducis el riesgo de quedarte sin liquidez en un momento crítico.

Por último, pregúntate si realmente usás todos los servicios por los que pagás. Ser socio de un gimnasio al que no asisitís regularmente, por ejemplo, es un gasto innecesario. Considera opciones más económicas que se adapten mejor a tus necesidades. Lo mismo se aplica a los planes de telefonía celular; a menudo, pagamos por más de lo que necesitamos si gran parte de nuestro acceso a internet proviene de conexiones en casa o el trabajo.